Una década después de que estallara la peor burbuja inmobiliaria de la historia, el acceso a la vivienda sigue siendo uno de los mayores problemas sociales. Y lo es porque los estados operan como un engranaje más de la industria financiera e inmobiliaria. La realidad de Barcelona lo confirma: tanto la burbuja hipotecaria de ayer como la burbuja del alquiler de hoy han sido políticamente cocinadas desde las administraciones.
El fantasma de Trump y Le Pen: la nueva derecha antiestablishment y anti-inmigración en las periferias urbanas de Catalunya
Un fantasma recorre Europa. Con la coronación de Trump todavía en la retina, nos adentramos en un 2017 que podría llegar a obsequiarnos con la de Le Pen en Francia. Lo más sorprendente es hasta qué punto esta oleada reaccionaria ha arraigado en muchos feudos de tradición obrera […]
Propietarios, proletarios y el nuevo sujeto político
Hace pocos años, ningún ‘experto’ hubiera dado pábulo a la sugerencia de que una crisis global podía estallar por una cadena de impagos hipotecarios en los guetos americanos. Sin embargo, que el gran crash de 2007 empezase en los barrios pobres de Estados Unidos no es casualidad. Las periferias urbanas se han convertido en el laboratorio más avanzado del capital financiero, y el cinturón rojo catalán en uno de sus […]